fugasyvolcanes: Isadora Duncan

ISADORA DUNCAN
1877-1927

"I have discovered the dance."

Curiosamente escribí muy poco sobre una de las mujeres que más admiré desde que mi abuela Ana la nombraba cuando jugábamos a los artistas. Y la nombraba sin haberla visto siquiera personalmente: cuando Angela Isadora Duncan -conocida como Isadora- vino a Buenos Aires, mi abuela seguro que estaba en su casa paterna de Benito Juárez porque era una joven de veintidós años, sin miras de matrimonio todavía.

Pero las noticias también llegaban a Benito Juárez y más a una familia de obreros, tipógrafos, carpinteros y periodistas curiosos e inquietos culturalmente.

Y mi abuela que era propiciadora oculta del amor libre debió haberla admirado mucho.

La bailarina que revolucionó la danza y que fue la inventora de la danza y la coreografía contemporáneas había nacido en 1877 en San Francisco, Estados Unidos, un 27 de mayo. Sus padres fueron el banquero Joseph Charles Duncan y de Mary Dora Gray, la hija menor del Senador de California Thomas Gray.

Joseph Charles Duncan - Mary Dora Gray

       Los Duncan no tuvieron una vida fácil. Su padre fue encarcelado por estafas reiteradas.
       Mary Dora Gray se puso a su familia a los hombros y empezó a dar lecciones de piano para mantener a sus cuatro hijos: Elizabeth, Isadora, Raymond y Augustin.
       Isadora cursó la escuela pública hasta los diez años. Después, iniciada en la música por su madre, teniendo desde chica un talento intuitivo para el baile clásico, empezó a dar, con su hermana Elizabeth, clases de danza a otros chicos. Todos los hermanos fueron formados con una vasta cultura, con una mentalidad muy abierta y con inquietudes artísticas y, a pesar del puritanismo de la época en que todo lo artístico se veía como diabólico.
         Cuando se mudaron a Chicago, ella, ya adolescente empezó a estudiar formalmente danza clásica. La desgracia las perseguía: un incendio las dejó de nuevo en la calle. Salvaron su vida y eso era mucho. Se volvieron a mudar destino a New York. Allí Isadora debutó en 1887 en el elenco del Daly's Theatre, fundado por Augustin Daly en la 30th. Street en Broadway en 1871

Augustin Daly

La compañía representaba a Shakespeare e iba de gira por distintos estados de la Unión a las que se incorporó también Isadora.

Primera hada en Midsummer Night's Dreams

Augustin Daly también había abierto el Daly`Theatre en Londres en 1893 y allí también fue Isadora.

Abril1896 -
Fotografiada por su hermano Augustin

New York -1898 - Foto: Jacob Johnson Schotlz.

En 1899 se quedó a vivir en Londres, contrariamente a la tendencia de la época en que todos emigraban hacia América.

En Londres se pasaba horas en el British Museum observando sobre todo la colección de la antigua Grecia, especialmente los grabados en las ánforas con figuras danzantes.

Así empezó a perfilar su estilo que basaría en lo que ella consideraba primitivo y que, ciertamente, es la primera manifestación expresiva humana: la danza.

De este modo se veía como una danzarina de esos tiempos en que las mujeres no estaban encorsetadas. Y lo que veía y ponía en práctica para la danza, lo ponía en práctica en su filosofía de vida y en sus acciones.

Cuando se mudó a Paris iba a observar los temas que la obsesionaban en el Louvre y en el Musée Rodin.

Isadora quita la pomposidad de la escena sin decorados rococó, pesados con gobelinos y adornos aúreos, sólo algunas telas azules, celestes… Y la quita también del vestuario, volviendo a la túnica que deja entrever su cuerpo desnudo y baila no sólo sin tutú sino descalza, sin maquillaje y con el cabello al aire.

Ella quería ser una bailarina clásica, pero del clasicismo griego original -no del renacentismo- y una bailarina del siglo XX, en el sentido futurista.

Después de aguantar todo tipo de rechazos y abucheos, fue imponiendo su estilo y terminó siendo primera figura a nivel internacional.

"Tuve tres grandes maestros, los tres grandes precursores de la danza en nuestro siglo: Beethoven, Nietzsche y Wagner. Beethoven creó la danza en un ritmo potente, intenso, Wagner en una forma escultural, Nietzsche en espíritu. Nietzsche fue el primer filósofo danzante."

Aprendió alemán para poder leer al Frederick Nietzsche en su idioma.

Empezó a actuar en distintos lugares, en Alemania, Hungría, Italia, Rusia y en su admirada Grecia, en donde ella iba a sus amados archivos y librerías a buscar manuscritos y obras musicales originales.

Edward Gordon Craig

En diciembre de 1904 conoció en Berlín a de Gordon Craig [Edward Henry Gordon Craig -1872 - + 1966], dramaturgo, escenógrafo, actor y director de teatro.
Aunque Craig estaba casado, ella se enamoró locamente de él y mantuvo una relación muy extensa.

Con él tuvo a su hija Deirdre en septiembre de 1906.

Cuando en 1908 se cerró su Grünewald Dance School, volvió a Paris y actuó con un éxito absoluto en el teatro Gaité – Lyrique a principios de 1909.

Paris Singer

Después de una de estas presentaciones, una noche se apareció Paris Singer, el tercer hijo varón del fundador de la fábrica Singer Sewing Machine Company, la primera fábrica de máquinas de coser, en el camarín de Isadora y le dijo: “Vine a ayudarle. ¿Qué puedo hacer?”

Con la riqueza como la suya, había algo que él podía hacer por ella, seguro. En su Autobiografía lo nombraba Lohengrin, uno de los Knight of the Round Table – Los caballeros de la Mesa Redonda. Pronto se daría cuenta de que su galante benefactor tendría su propio precio.

Isadora con Patrick

Mientras el matrimonio de Singer se desmoronaba, ellos se embarcaron en una relación apasionada.



     En septiembre de 1909, estando en Venecia, ella quedó embarazada. Después de hacer un crucero por el Nilo, volvieron a Francia en donde nació su hijo Patrick Augustus el 1 de mayo de 1910.

Pasaron el verano en el castillo de Oldway en Devon en donde construyeron un salón de danzas.

El Salón de Oldway - Devon

A pesar de los regalos extravagantes y lujosos, había cierta fricción entre Paris Singer e Isadora y su visión del mundo.

Aunque el romance continuó hasta 1912, Singer, como muchos hombres muy adinerados, tenía por costumbre satisfacer sus propios caprichos.

Isadora no se quedaba atrás.

Con Patrick y Dierdre

        Singer le había comprado una propiedad que miraba al Sena…

         Pero esa propiedad sería funesta.

        El 19 de abril de 1913 Paris Singer e Isadora se encontraron para almorzar en Paris.

Más tarde, cuando el chofer estaba llevando a sus dos hijos a la casa con su institutriz, el motor se ahogó y él se bajó para darle manija al auto.

        El auto volvió a arrancar en una pendiente antes de que el chofer pudiera volver a subirse y siguió tomando velocidad antes de cruzar el Boulevard Bourdon y se sumergió en un banco cubierto de pasto en el Sena. A pesar de los desesperados intentos de los que estaban allí para salvarlos, los tres ocupantes se ahogaron.

Noticia de la muerte de los hijos de Isadora Duncan

          Isadora se quedó sin palabras: fue un golpe fatal en su vida.

          Quedó como Níobe, convertida en piedra ante el dolor.

Al año siguiente, mientras trataba de reponerse en Viareggio, conquistó a un joven escultor italiano Romano Romanelli y quiso quedar embarazada, pero el bebé nació prematuro y apenas sobrevivió, a punto tal que no se le puso nombre.

En 1914, mientras los parisinos se preparaban para la guerra, ella decidió volver a Estados Unidos.

Isadora y sus alumnas -

Foto: Paul Berger - Paris

Isadora entregó su nueva escuela para que las Damas de Francia instalaran un hospital de campaña.

Singer hizo lo mismo con Oldway que se convirtió en el American Women’s War Relief Hospital, financiado totalmente por él.

En noviembre de 1914 Isadora partió en el buque Queen Mary para New York.

En 1916 vino a Buenos Aires a bailar al Teatro Coliseo en una época en que la pacatería, la moralina y la doble moral era materia dominante.

Después de la pérdida de sus hijos, a Isadora no le preocupaban las maledicencias ni las convenciones sociales ni el dinero.

Cuando a principios de julio llegó a Buenos Aires en barco desde Río pudo comprobar que los elementos escenográficos suyos: cortinas, lienzos y alfombras no habían llegado. Tuvo que comprar otras de inmediato porque su presentación era inminente y eso costaba algo así como cuatro mil dólares [de entonces!!]. Ella no tenía dinero y consiguió un crédito para pagarlo.

Tampoco habían llegado sus partituras, aunque las pudo reemplazar gracias al Director del Conservatorio de Música de Buenos Aires que se las prestó.

Igualmente Isadora se alojó en el Plaza Hotel que era el más caro de la ciudad e hizo algunos recorridos por distintos barrios.

La noche anterior a la segunda presentación Isadora se fue a un café nocturno con su cicerone. Allí un grupo de estudiantes la reconoció y le pidieron que bailara el Himno Nacional porque era la víspera del 9 de julio. Y lo bailó. ¿Para qué?

La presentación del 12 de julio fue recibida con distancia, más aun, con frialdad.

Aunque los Ballets Russes de Vaslav Nijinsky en 1914 con su aire moderno había encantado a nuestro público del Colón, en este caso se quedaron pasmados, estupefactos, pensando que lo que hacía Isadora era pobre y se sintieron burlados.

Al día siguiente fue convocada por el gerente del Coliseo que la intimaba a romper el contrato debido a esa acción. El Director Musical Dumesnil logró que siguiera la gira.

En la tercera presentación Isadora quería interpretar a Wagner y Dumesnil, que estaba con licencia del Ejército Francés en plena guerra, se negó a seguirla. A pesar de que otro director la acompañó, esto también la perjudicó a los ojos de los argentinos.

Durante la actuación, unos espectadores empezaron a hablar en voz alta. Isadora no era cualquier cosa y entonces paró la danza y se dirigió al público:

"Vous n´étes que de Négres!" - ¡"Ustedes no son más que negros!"

         A partir de ahí se cancelaron las otras funciones y antes de irse a Montevideo, la bailarina tuvo que dejar sus aros de esmeralda y su tapado de armiño que le había regalado Paris Singer en garantía del pago del hotel.

       [Ésta es la versión "oficial". Mañana o pasado postearé la que cuenta la propia Duncan en su Autobiografía.]

        En cuanto a su vida privada, desde que se pusieron de moda los estudios de género, se le adjudican relaciones lésbicas varias.

Mercedes de Acosta

Entre ellas con Mercedes de Acosta [N. York, 1893 – 1968], de padres cubanos, escritora casada con Abram Poole [1920-1935] que cuenta haber sido amante también de Greta Garbo, Marlene Dietriech y de un montón de hermosas mujeres célebres de la época.

En el caso de Duncan, las fechas no concuerdan ya que esa relación parece haber sido cuando ella en realidad estaba de gira en Sudamérica – 1916.

         También se le adjudica a Isadora haber confesado su bisexualidad en la gira de Boston, pero no se encuentra en su Autobiografía ni en los estudios más sesudos sobre ella.

           Se le atribuyen relaciones con Eleonora Duse cuando, luego del accidente en que murieron sus hijos, ella fue a Corfú con su hermano y su hermana.
           Fue invitada a la villa de Eleonora Duse en Viareggio, al lado del mar, adonde iban los adinerados y los famosos. Allí Isadora pasó unas semanas.

Eleonora Duse

Duse era la actriz italiana más conocida en el mundo y se había casado joven con Tebaldo Checchi con quien tuvo una hija, Enrichetta. Tuvo varios amantes, entre ellos, Martino Cafiero. Se dice que en esos momentos estaba haciendo un duelo por la separación de la feminista Tina Poletti y de ahí que se especula que inició un romance con Isadora. Sin embargo, nadie lo pudo probar. Por otro lado, el gran amor de Eleonora Duse fue el escritor Príncipe Gabriele D ' Annunzio, de quien se separó mucho más tarde, cuando D ' Annunzio anunció sus simpatías por el fascismo, aunque hay quienes sostienen que se siguieron viendo clandestinamente durante mucho tiempo más.

En su Autobiografía Isadora cuenta que estando en Viareggio le suplicó tener relaciones sexuales al escultor italiano Romano Romanelli porque quería hijo. Quedó embarazada, el bebé nació prematuro, murió a las pocas horas de nacer y su nombre es ignoto.

Natalie Clifford Barney

También la relacionan con Natalie Clifford Barney [1876-1972] que era una de las tantas norteamericanas que vivieron el Paris de la Belle – Èpoque y abrían las puertas de su casa para tertulias bohemias con invitados de todo el mundo literario y artístico, entre ellos, el extravagante hermano de Isadora, Raymond Duncan.

Raymond Duncan con su esposa
griega e hijos

En sus veladas griegas se la podía ver también a Isadora bailando con Colette, cubiertas de gráciles velos.

Sin embargo, sólo hay rumores sobre esas relaciones.

Raymond Duncan

Cuando en Rusia estalló la Revolución, simpatizó con los revolucionarios. En 1922 fue a Moscú. Ya era una artista muy famosa y fue muy bien recibida.

Cuenta Gordon Mc. Vay en su Esenin: a Life, un estudio minucioso de la vida de Serguéi Esenin, que Isadora fue invitada a una reunión social y en cuanto lo vio se le tiró encima y lo besó con un “french kiss”, a la française o sea, con un beso de lengua o un terrible chupón y le dijo algo así como que era lo más hermoso que había visto.

Isadora & Serguéi Esenin

Serguéi era ya un poeta famoso en Rusia, había tenido dos casamientos y varias relaciones. Pero terminó enamorándose de Isadora. Tenía veintiocho años, diecisiete menos que ella. Fue su único marido legal, su esposo con libreta.

A partir del casamiento Esenin la acompañó a su gira europea en donde se distinguieron por sus extravagancias en Alemania y Francia.

Luego fueron para New York. Ni bien llegados, Isadora hacía su vida y tenía su mundo de la danza. Serguéi se empezó a juntar con los rusos blancos, los emigrados de la Revolución porque era el único lugar en que se sentía en casa. Entendible total: cosas de la extranjería.

También tuvo su escándalo en su país de origen, al menos los norteamericanos lo sintieron así.

En septiembre Isadora daría su función en el Boston's Symphony Hall.

Si bien ellos escandalizaban a los puritanos, los simpatizantes de la revolución estaban encantados. En una especie de mezcla de las bellas artes, ella bailó con sus túnicas lúbricas en el escenario. Como era su costumbre se mecía en las tablas y de pronto fue deteniendo su danza y comenzó con una arenga:

“Éstos no son dioses griegos! Esto es falso!

Y ustedes son tan falsos como estas estatuas de yeso!...”

Acto seguido [sic! en tiempo pasado] -a través de un duro, real y completamente sermón puritano, empezó a hablar de los crímenes del puritanismo de New England, sobre la belleza natural de un cuerpo humano desnudo…

”Nudity is truth!” – “¡La desnudez es la verdad! gritó.
“It is beauty, it is art!“ – “¡Es belleza, es arte!”

Entonces hizo ondear un chal rojo sobre su cabeza y aulló:

“This is red! So am I!” - “¡Esto es rojo! ¡Yo también soy roja!”

Encarando a la gente, se rasgó la parte superior de su túnica y la dejó caer…

Sus pechos al desnudo!

“This!... This is Beauty!” - ¡Esto… esto es belleza!!

La gente se fue en éxodo y ahí se suspendió el concierto y toda la gira.
Serguéi Esenin estaba allí vestido en forma exótica con un traje georgiano con un saco negro con botas y un gorro de piel. Ni bien vio esto, empezó a cantar La internacional.

Irma Duncan - Isadora & Serguéi Esenin

Ella tenía la ciudadanía soviética y los dos habían firmado que no cantarían La internacional en suelo norteamericano. Afortunadamente, nada llegó a mayores porque no llegó a los diarios y el Intendente Municipal de Boston, James Curley, le revocó su licencia para representar en Boston para siempre.

A partir de ahí le fue muy difícil hacer otras presentaciones y empezó una época de problemas económicos y con deudas. Serguéi Esenin, alcohólico, nostálgico, finalmente decidió volver a Moscú y, aparentemente, según cuenta la que era la secretaria de Isadora, con él se fue un maletín en donde estaban los pocos ahorros de Isadora.

Para la Navidad de 1925, al poco tiempo de volver, Serguéi Esenin, se alojó en el Hotel Angleterre de Leningrado y no salió durante tres días de su habitación en donde se dice que estaba ebrio. El 28 de diciembre aparece ahorcado en su habitación. Supuestamente un suicidio, pero también se sospechó de asesinato.

Con sangre de sus brazos escribió:

“Hasta pronto, amigo mío, sin gestos ni palabras, no te entristezcas ni frunzas el ceño. En esta vida morir nada nuevo, pero vivir tampoco lo es.

Isadora mientras tanto, con fama de extravagante, alcohólica y adicta a alcaloides, terminó yéndose de Estados Unidos a Francia.

Sus amigos le aconsejaron empezar a escribir su autobiografía… Así podría ganar un poco de dinero.

El 14 de septiembre estando en Niza con amigos pasó Benoît Falchetto manejando su auto de carrera Amílcar. Ella quiso dar una vuelta. Llevaba puesto el chal de seda pintado por el artista ruso Roman Chatov, un regalo de su amiga Mary Desti. Mary le dijo que se pusiera un abrigo porque tendría frío en un auto sin capota, ella le respondió que era suficiente con el chal.

Cuando se fueron ella les dijo a Desti y sus amigos: "Adieu, mes amis. Je vais à la gloire!" - ¡Adiós, mis amigos. Me voy a la gloria!”

Según cuenta Glenway Wescott, el novelista norteamericano, Desti le contó que Isadora en realidad dijo: “Je vais à l'amour!” “¡Yo voy al amor!” porque se iba con Falchetto al hotel para un encuentro amoroso y que no quisieron decir eso cuando empezaron a llegar los periodistas e inventario la otra frase.

El chal de seda con que rodeaba su cuello, inmediatamente después de la partida se enredó en las ruedas y el eje. Isadora aullaba de dolor… Desti contó que ella le había gritado para advertirle que tuviera cuidado con ese chal ni bien partieron. Ni bien paró el auto, Desti la llevó al hospital en donde fue declarada muerta por estrangulamiento…

Tenía cincuenta años.